Hoy queremos hablar de la logística que traerá la administración de la vacuna contra el Covid-19.

Hay dos desafíos principales de los que todos están hablando en este momento mientras se oficializa la distribución mundial de la vacuna. Se sabe que la vacunes de Pfizer y Moderna requiere de dos inyecciones,

 ¿qué va a suceder con los cientos de millones de agujas, jeringas y PPE una vez este proceso de inicio? Ahí es donde entra Grupo Brocal.

A medida que la vacuna se acerca, en Grupo Brocal nos preparamos para este momento. Hay tres cosas específicas que estamos haciendo para aprender de la primera parte de la pandemia y tomar acción para esta segunda etapa que se nos acerca.

Una de las acciones es cuidar los lugares de atención médica tradicional como los hospitales, clínicas, hospitales de urgencia; y hemos aprendido que, cuando las pruebas se generalizaron para las masas, tuvimos que preparar el país con el equipo adecuado para el desperdicio de basura médica bioinfecciosa. Esto nos ayudó a entender la situación y ahora nos ayuda a prepararnos en cuanto a número de contenedores que iremos a necesitar una vez la vacuna empiece a ser distribuida.

Por un lado, debemos asegurarnos de una logística adecuada de que la vacuna llegue a donde se necesita, y por otro lado debemos asegurarnos de que estos lugares están preparados para el desperdicio médico que la vacuna dejará. 

Tenemos un equipo de operaciones trabajando día y noche, jugando con varios escenarios posibles de la siguiente etapa de la pandemia, para estar seguros de que tenemos los contenedores para punzocortantes listos para distribución en conjunto con la vacuna.

En base a estos aprendizajes, decidimos traer la fabrica a Guatemala. De esta manera podemos surtir tanto a entes públicos en la industria de salud, como instituciones privadas. Teniendo la capacidad adecuada y a nuestro personal preparado para disponer al país del material adecuado para salir de esta pandemia.